Germán Malaver [@german_malaver]
Dora Barrera [@doramar1010]
Crepes & Waffles (Centro Comercial Metrópolis)
Oración al Santo Juez
“Si ojos tienen que no me vean, si manos tienen que no me agarren, si pies tienen que no me alcancen, no permitas que me sorprendan por la espalda, no permitas que mi muerte sea violeta, no permitas que mi sangre se derrame. Tú que todo lo conoces, sabes de mis pecados, pero también sabes de mi fe. No me desampares” ¡Amén!
Así comienza una de las historias más impactantes que he leído, la famosa novela Rosario Tijeras, escrita por el paisa Jorge Franco, publicada en el año 1999, pero que llegó a mis manos en el año 2007.
La historia de cómo llegué a esta fantástica, drástica y a su vez emocionante historia, es muy cómica. Terminaba de leer Romeo and Juliet (Romeo y Julieta), en su idioma original (inglés británico), escrita por el gran William Shakespeare (de mis escritores favoritos), y la verdad no tenía recursos para adquirir otro amigo, un amigo que me hiciera imaginar y volar hasta el infinito y más allá; (y es que mi abuelita materna, que en paz descanse, solía decirme: “Germán cuando lees nadie te puede frenar, porque leer es el mejor viaje que puedes hacer”), y esas palabras han quedado plasmadas en mi corazón. Así que me puse a pensar cómo podría conseguir un libro, y decidí irme donde mi abuelita paterna, y estaba mi tía Luz Ángela (ella es profesora de ciencias sociales y filosofía y letras), pero en mi corazón sentía un peso por no tener dinero para darme ese gusto. Llegué a su casa, abrumado y acongojado, ella se encontraba viendo National Geographic, indagó qué me acontecía, le respondí mi triste realidad y me respondió “tranquilo, ven ayúdame a calificar estos parciales de los chicos de undécimo grado y no pienses en cosas tristes”, y le dije está bien, pero con el corazón triste. Mientras yo le pasaba los exámenes, ella se reía de ver las respuestas. Se acabó el programa y me preguntó que, si quería ver una película y yo acepté, así que mi tía se levantó y puso en el DVD, The Pianist (El Pianista), y la verdad al comienzo me pareció muy aburrida, hasta el punto que le dije que si por favor podía cambiarla, pero justo en ese momento sucedió algo que me impactó y como magia me enganché con la trama, y seguimos viéndola y desde ese momento se convirtió en mi favorita.
Después de toda esa aventura, ya era hora de regresar a mi hogar y me despedí como usualmente lo hago, dándole el beso en la mejilla y agradeciéndole el momento ameno, pero ¡oh sorpresa!, mi tía me tenía un detalle, me mostró cinco libros: El Hombre que Calculaba (Malba Tahan), Mujercitas (Louisa May Alcott), Moby Dick (Herman Melville), Hamlet (William Shakespeare) y Rosario Tijeras (Jorge Franco), y me anunció que podía llevarme los que quisiera, así que escogí cuatro ¿Cuál creen que dejé? (si dijeron que el primero, acertaron). Me fui tan contento para mi casa, y así fue como llegué a Jorge Franco.
¿Por qué recomiendo esta obra literaria? Porque sin querer queriendo me enseñó a no juzgar a primera, segunda o tercera vista. Cuando lo tuve en mi mano, solo me dieron ganas de abandonarlo y dejarlo encima de mi mesa de noche, pero existió una fuerza magnética que me atrajo y me dio un interés inexplicable por devorarme cada letra que el autor plasmó. Y ahí entendí que todos somos como un libro, nuestra apariencia es la portada y a veces nos dedicamos a juzgar sin antes saber su historia.
La obra literaria, cuenta también con serie y película, pero personalmente el poder de las letras es más poderoso que lo anterior.
¿Y tú qué prefieres? ¡Cuéntanos! #YoLeoConGermador
Para mayor información visita la página web : https://jorge-franco.com/